Y este fin de semana, tocó correr de nuevo un duatlón, y tengo que pensar para averiguar cuál fué el último.
Estuvimos toda la familia en Igualada en un duatlón de los que me gusta por sus circuitos tanto de carrera (poco asfalto), como por su bici (leve subida y bajada). El resultado no estuvo del todo mal: finalizo sin ningún dolor y buena recuperación al día siguiente, pero a todo esto tengo que encontrar un pero...
El sábado anterior, luchando para que Pol se durmiese hasta las 23h pensando que se despertaría tarde y tendríamos que levantarlo, pues no. A las 7:30 y mientras estaba preparando el material de competición, ahí estaba el 'peque' con sus despertares fastuosos. Todo listo. Al coche y para Igualada.
Allí Pol en una pista de atletismo, ¡vaya en su salsa!, corriendo y persiguiéndolo allí donde va, tarea a la que se ocupa Marisol mientras yo compito. Acabada la carrera, recoger y para casa. Pol duerme los 45' de viaje. Ya ha recuperado fuerzas para darnos guerra toda la tarde. Hacer la comida. Comer y salida obligatoria a centro comercial porque en casa no hay quien aguante con él. Hasta las 20h. Ahí los papás de la criatura ya no dan pie con bola pero Pol resiste hasta las 22h. dando 'botes' arriba y abajo hasta caer rendido. Después los papás lo imitan.
Por suerte, no despertó en toda la noche y dormimos del tirón, algo que hasta hace un par de meses era impensable.
Esto es lo que explica realmente cómo se logra llegar en una posición 180º de la general y no siendo capaz de correr 6km a menos de 4'/km. Y pasando de la 1h06'00" y 56ª posición del año 2008, a la 1h14'27" del 2012. ¡Qué le vamos a hacer!
Esta entrada es a modo de comentario, estoy encantado con Pol y en ningún momento quiere decir que cambiaría mi situación actual con la de antes.
Estuvimos toda la familia en Igualada en un duatlón de los que me gusta por sus circuitos tanto de carrera (poco asfalto), como por su bici (leve subida y bajada). El resultado no estuvo del todo mal: finalizo sin ningún dolor y buena recuperación al día siguiente, pero a todo esto tengo que encontrar un pero...
El sábado anterior, luchando para que Pol se durmiese hasta las 23h pensando que se despertaría tarde y tendríamos que levantarlo, pues no. A las 7:30 y mientras estaba preparando el material de competición, ahí estaba el 'peque' con sus despertares fastuosos. Todo listo. Al coche y para Igualada.
Allí Pol en una pista de atletismo, ¡vaya en su salsa!, corriendo y persiguiéndolo allí donde va, tarea a la que se ocupa Marisol mientras yo compito. Acabada la carrera, recoger y para casa. Pol duerme los 45' de viaje. Ya ha recuperado fuerzas para darnos guerra toda la tarde. Hacer la comida. Comer y salida obligatoria a centro comercial porque en casa no hay quien aguante con él. Hasta las 20h. Ahí los papás de la criatura ya no dan pie con bola pero Pol resiste hasta las 22h. dando 'botes' arriba y abajo hasta caer rendido. Después los papás lo imitan.
Por suerte, no despertó en toda la noche y dormimos del tirón, algo que hasta hace un par de meses era impensable.
Esto es lo que explica realmente cómo se logra llegar en una posición 180º de la general y no siendo capaz de correr 6km a menos de 4'/km. Y pasando de la 1h06'00" y 56ª posición del año 2008, a la 1h14'27" del 2012. ¡Qué le vamos a hacer!
Esta entrada es a modo de comentario, estoy encantado con Pol y en ningún momento quiere decir que cambiaría mi situación actual con la de antes.
4 comentarios:
¡Cómo ha cambiado nuestra recuperación post-competición! Je, Je :D
Antes llegabamos a casa, comiamos y nos pegabamos una siesta impresionante... ¡Suerte que aprovechamos! Ja, Ja :)
Igualmente, no cambio para nada el pasado con el presente...
¡Venga, Pol, a darnos más caña, que ya nos gusta! :D
Marisol ;P
hehehe papi...vera con dos...hehehe
Ya se que no cambiarías por nada tu situación actual, pero reconoce que son unos cabroncetes muy cariñosos. je!je!
un abrazo company!
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