Nos vamos de vacaciones

Llegó el triatlón de Barcelona, y con él nos vamos de vacaciones. Una prueba con numerosa gente, aunque la mejora de la organización hace que poco a poco vaya consolidándose.

Esta es la prueba en la que siempre me desenvuelvo mejor: una natación rápida, un ciclismo “fácil” y una carrera corta para dar lo que queda. ¡Vaya que por mucho Ironman que entreno, sigo siendo un sprinter! Por el contrario, a Marisol siempre le sucede al contrario, necesita una bicicleta dura y una carrera larga.

El agua se me dio bien esta vez, ya era hora porque llevaba unas cuantas que más que natación parecía boxeo. Me mantuve a un ritmo agónico desde el principio, manteniendo el ritmo de Salva (el Prat) y sintiendo las uñas de Ernest en las plantas de mis pies. Aguanto la agonía hasta la salida del agua y veo por allí a Amand Redondo (nunca había salido tan cerca de él).


Transición larguísima, aprieto el ritmo de carrera hasta mi ‘caballito’ y allí me lanzo a pillar al grupito de Amand. Imposible. Van fuertes ellos, y yo solo. Primera vuelta aguantando hasta que por detrás llega el grupo de Ernest, Mayoral y alguno más del Reus. De repente veo que me pasa Pellejero. Había tenido problemas en su bici y venía retrasado. Ahí formamos el grupo donde esta vez hago más bien el ‘perrete’ (me había vaciado al inicio del segmento) y los del Reus y Pellejero, parecían tener prisa.

En la T2 todo sale bien y a correr al máximo. Noto haber perdido la ‘chispa’ que he tenido esta temporada, pero es que desde el maratón y de Niza, mis piernas se sienten de elefante. Veré si lo arreglo de ahora a septiembre.

Carrera adelantando a alguno y hundiéndome frente a otros. El caso es que mantengo mi ritmo de forma digna y llego a meta en el lugar 27º, idéntico al del año pasado. En clasificación masculina, hemos terminado en un meritorio 13º puesto de los 30 equipos participantes.


Marisol, tras la natación, tuvo que comenzar a remontar lo perdido en el agua. Esta vez, sí contó con la colaboración de Judith (del Cariñena) sobre la bicicleta y remontaron algunos puestos más hasta llegar a la carrera donde acabó de adelantar algunos puestos más.


Finalmente, terminó en 14ª posición, un poco más retrasada que el año pasado. Pero, ¡qué bien se lo pasó!


Como es habitual, tercer lugar del podio para las chicas a los pies de una de las torres gemelas.


Después, ‘tercer tiempo’ tomando unas claritas en una terraza de la Vila Olímpica, con la gente del Sant Joan, echando unas risas y disfrutando un triatlón completo.